Otoño

Lo que me transmite la música de este grande...

Sutiles brazos acuden a la bienvenida del sol.
La tierra clama por su llegada,
los arboles sacuden sus copas frondosas,
alguna que otra hoja cae,
el viento se la ofrece al sol como ofrenda.
Y sigo esperando su total inmensidad.
Mientras (tanto), un perro come de mis manos un dulce,
mira al cielo y corre, cantándole con sus ladridos al sol.
Me acuesto en el asfalto, te espero.
¿Me esperas?
 
Buenas noches.
 
16/4/09